Una de las cosas que más me gusta de la cocina es preparar recetas todo terreno, esas que le gustan a todo el mundo y de las que siempre te preguntan: ¿hay más?
Las croquetas de pollo entran en esa clasificación, les roban una sonrisa al comensal y otra más grande al cocinero que queda satisfecho con su labor. Se hacen procesando pechugas de pollo, se les incorpora un poco de crema y apenas huevo, y por último se las apana. Es una comida súper vérsatil: la podemos usar para una picada, para una fiesta infantil ¡a los chicos les encanta!, o tenerlas en el freezer (duran hasta tres meses crudas) para un día que tengamos fiaca para cocinar.
Para esta receta van a necesitar:( Salen 16 croquetas)
400 gr de pechuga
100 gr de crema de leche
1/2 huevo batido
1 cucharadita de sal
1/4 cucharadita pimienta
1/4 cucharadita de nuez moscada
1 diente de ajo,
1 cucharada salsa worchestershire.
Para el apanado: 1 taza de harina, 2 huevos y la mitad que nos quedo batidos y salpimentados, cantidad necesaria de pan rallado. 1/4 taza de aceite para cocinarlas.
Como preparlas:
- Colocar la pechuga, el diente de ajo, la sal, pimienta, nuez moscada y salsa worcestershire en una procesadora (también pueden hacerlo con mixer). Procesar por 4 a 5 minutos. La carne se hace una pasta.
- Agregar la crema y la mitad de un huevo. Pocesar 30 segundos.
- Armar las bolitas con las manos húmedas para evitar que se nos pegue la pasta en las manos.
- Pasarlas por harina, los huevos batidos salpimentados y el pan rallado.
- Colocar el aceite en una placa para horno. Cocinar a horno fuerte por 2o a 25 minutos aproximadamente.