Esta receta de paté ocupa un lugarcito especial en mi corazón, porque es una de las primeras que aprendí a preparar (hace un par de años ya). Cuando la probé por primera vez me sorprendió su sabor delicado y sutil. Es súper fácil y si siguen los pasos y lo condimentan con hierbas frescas: ciboulette, tomillo, orégano y estragón tienen el mmm…esto está buenísimo asegurado.
También pueden partir de esta receta base y darle su toque personal: agregarle granos de pimienta para hacerlo un poco más picante, pedacitos de hongos salteados para hacerlo trufado, o espárragos en rodajitas para darle un toque más verde. Como sea esta receta no falla.
En las fiestas comamos rico que alegra el corazón!
Tip: acompañenlo con un pan especial como de brioche, con pasas o de miel!
Van a necesitar:
1 cebolla
1 diente de ajo
2 cucharadas de aceite
350 de hígados de pollo muy frescos
3 cucharadas de coñac (opcional)
3 cucharadas de vino blanco u oporto
3 cucharadas de hierbas picadas frescas (orégano, perejil, tomillo)
100 gr de manteca bien fría en cubos
5 cucharadas de crema
Sal y pimienta a gusto
Preparación:
Cortar la cebolla y el diente de ajo en cubos.
Calentar una sartén, agregar el aceite. Cocinar la cebolla y el ajo por 5 minutos, o hasta que estén transparentes.
Agregar los hígados de pollo por aproximadamente 10 minutos, hasta que cambien de color y no tengan sangre. Revolver de vez en cuando.
Agregar las hierbas picadas, desglasar con el coñac y el vino. Cuando se evapore el alcohol apagar el fuego.
Procesar junto con la manteca. Pasar por un tamiz. Por último agregar la crema de leche. Reposar en la heladera por 4 hs mínimo antes de consumir.